A continuación, te proporcionamos una descripción detallada de la manera más eficiente para desempacar tus pertenencias luego de una mudanza, con el objetivo de que puedas instalarte en tu nuevo hogar en un plazo breve pero adecuado.
Por muy obvio que parezca, lo primero que debes hacer es limpiar tu casa nueva. Aprovecha la ausencia de muebles y cajas para aspirar las alfombras o limpiar los suelos, baños y cocina en profundidad.
Poniendo cada caja y mueble en su habitación correspondiente antes de desembalar acelerarás todo el proceso y evitarás el caos de ver cajas desperdigadas sin ton ni son por toda la casa. Y antes de desempacar, analiza los espacios de la habitación y decide dónde irá cada cosa.
Lo más adecuado es empezar a desempacar lo necesario e imprescindible en cada habitación, para poder pasar la primera noche en el nuevo domicilio, como por ejemplo sábanas, ropa, algunos utensilios de cocina, toallas, entre otros.
Para el segundo día en el nuevo domicilio, lo ideal es seguir con la cocina, pues se trata de un lugar que tomará tiempo desempacar, además podrás liberar muchas cajas y te permitirá habilitar más espacio. Recuerda no abrir cajas que no pertenezcan al lugar en el que estás trabajando, pues podrás confundirlas y colocarlas en un espacio no correspondiente.